Bernal puede ser pequeño, sí, pero te sorprenderás con la infinidad de cosas que puedes hacer, adéntrate por la Calle Independencia, para visitar el Museo de la Máscara.
Tiene más de 300 piezas traídas de diferentes latitudes, algunas están talladas en penca de maguey deshidratada o en hueso, por mencionar algunos.
Para comprar artesanías, nada como el Centro Artesanal La Aurora, frente al Jardín Principal. Aquí verás a los artesanos en acción, confeccionando abrigos, rebozos, tapetes y cojines hechos en lana y tejidos en telar de pedal.
En los alrededores podrás emprender la Ruta del Queso y Vino y conocer la comunidad de San Antonio de Cal, ubicada a espaldas de la Peña de Bernal.
Ahí, se conservan intactas las costumbres de la cultura otomí-chichimeca, por lo que la región fue declarada Patrimonio de la Humanidad, por la Unesco.